Hace unos días falleció Stan Winston, uno de los últimos ilusionistas visuales que haya dado el cine en su larga historia. Heredero de una tradición iniciada por el mago de Montmartré, Georges Meliés, y continuada por artesanos como Ray Harryhausen, Winston contibuyó con sus creaciones mecánicas a revolucionar los efectos visuales en la pantalla grande. Entre sus hijos pródigos se destacan los monstruos de Alien, la Cosa y los dinosaurios de Jurassic Park, como así también los robots de Terminator, Depredador e Inteligencia Artificial. Pero no sólo con animatronics nos deslumbró este maestro sino que también lo hizo a través de una revolucionaria técnica de maquillaje que se puede apreciar en varios films de Tim Burton como El Joven Manos de Tijera o Batman Regresa. Si uno repasa la interminable lista de colaboraciones de Winston para Hollywood notará que su trabajo es sinónimo de taquilla pero sobre todo de calidad. Finalmente se ha ido un hombre que podía construir un mundo fantástico sin la utilización de la computadora y el abuso visual que esta conlleva, se ha ido el último Gepetto del cine.
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1 comentarios:
Un gran influyente de los esfectos especiales. Este tipo no nesecitaba la máquina para mostrarnos otra realidad, lo hacía a la vieja escuela. Stan te vamos a extrañar!
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