Cobertura: 15 Festival Cievyc Cine 08 Sucede que me canso










Sucede que me canso, De Victoria Maffia, Con Alfredo Landaveri; Máximo Occhipinti , 5', 2007

La cámara también se cansa

Sucede que me canso es una historia de amor y de silencio; de dos adolescentes que se pelean todo el tiempo para ocultar lo que sienten el uno por el otro.

Hay un único testigo: el baño del colegio, que al mismo tiempo se convierte en cómplice de los protagonistas al ceder sus puertas, en las que se escriben fragmentos de un poema, como la única vía posible de verdadera comunicación entre ellos.

Es cierto que los personajes se cansan por tener que afrontar la situación de la manera en que lo hacen pero, de alguna manera, la cámara también. Durante la primera pelea, en la que ambos se golpean, permanece como si fuera un compañero más y quisiera ver el enfrentamiento más de cerca. Pero a la vez siguiente simplemente se aleja, como si ya no quisiera verlos así y ya fuera suficiente.

Hacia el final se produce lo que se espera desde el primer momento: el encuentro en el baño, donde pueden ser ellos mismos. La forma en que se miran, fijamente y durante varios segundos, dice más que mil palabras y compensa cada golpe, insulto, empujón. Y también tiene la calidez de un beso; un beso que cada espectador pudo ver aunque en la pantalla no se muestre.

M. Sol Salaberría

Cobertura: 15 Festival Cievyc Cine 08

Aquí van algunas de las imágenes de la primera jornada del Festival de cortos Civeyc.




15 Festival Cievyc Cine 08

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Siga por el blog toda la cobertura del Festival realizada por los alumnos de la carrera de Periodismo y crítica cinematográfica del Cievyc, con reseñas, críticas y premios.

Metrópolis - Sábado 15/11, 21 hs, Dirección General de Museos


15 de noviembre de 2008
5º edición de La noche de los museos

La Dirección General de Museos presenta la quinta edición de La Noche de los Museos, que se realizará el sábado 15 de noviembre, desde las 19 horas hasta las 2 de la madrugada.

En el evento central de La Noche de los Museos se proyectará el mítico filme mudo alemán "Metrópolis" (1927) de Fritz Lang, con acompañamiento musical en vivo de La National Film Chamber Orchestra, integrada por Fernando Kabusacki (guitarra), Juan Carlos Mono Fontana (teclados), Fernando Samalea (percusión) y Matías Mango (teclados), y artistas invitados, frente al Centro de Museos de Buenos Aires, sede de la Dirección General de Museos, Av. de los Italianos 851, Puerto Madero, 21 hs. A continuación habrá un cierre a toda música con DJ Ale Kingston & Simon, VJ Carla Lucarella, DJ Javier Zuker, VJ Santiago Idelson, Chancha Vía Circuito, VJ Lucas DM, DJ Daleduro, VJ Soldelrio.

Será una larga noche de encuentros artísticos y culturales; una fiesta que vinculará a los museos y espacios de arte de las distintas zonas de nuestra ciudad.


Información al público:
Tel.: 4313-4073 / 4077 / 4079

Seminarios y Cursos en Noviembre


Estos son algunos de los cursos que se dictarán el mes de Noviembre:

JUEVES 13 DE NOVIEMBRE de 18:30 a 20:30 hs.

Seminario de Producción de Cine

Dictado por Magalí Nievas

Duración 4 Encuentros

Arancel $120

Alumnos del Cievyc Costo 50% Bonificado ($60)

Ex Alumnos Costo 25% Bonificado ($90)

VIERNES 21 DE NOVIEMBRE de 18;30 a 20:30 hs.

Seminario de Video Clip y Dirección Publicitaria

NIVEL 1

Dictado por Alberto Resano

Duración 4 Encuentros

Alumnos del Cievyc Costo 50% Bonificado

Ex Alumnos Costo 25% Bonificado

info@cinecievyc.com.ar


Secretos de Rodaje: El Tercer Hombre




Graham Greene, el gran novelista británico, escribió una narración que sería la base de El Tercer Hombre, su más famosa adaptación al cine. Realizada por Carol Reed, el guión contó en un principio con la aportación del autor. Pero pronto surgieron los problemas. Los enfrentamientos entre Green y Reed fueron continuos y cada vez más violentos motivados por los deseos del realizador de profundizar más en los personajes levemente anotados en el original. Interviniendo en la redacción definitiva del guión el propio Carol Reed. A su vez, Orson Welles escribió diálogos de su personaje y sugirió la idea de ampliar las secuencias finales de la persecución en la alcantarilla por los subsuelos de Viena que en un principio iba a ser más corta y anecdótica. Graham Greene tuvo su último discurso con los responsables de la película al enterarse de que habían cambiado el final que había escrito. Anna no se reunía con su enamorado Holly sino que pasaba lentamente a su lado en la escena final. Una de las secuencias más largas, patéticas y memorables de la historia del cine.

Joseph Cotten, popular en 1949 en los estudios londinenses de Ell Street, donde había rodado a las órdenes de Alfred Hitchcock Under Capricorn siempre reconoció a lo largo de su prolífica carrera que sus mejores papeles y su entrada en el mundo del cine se lo debía a su amigo el actor y director Orson Welles. Al ser contratado para el papel del oscuro novelista del oeste Holly Martins propuso inmediatamente a su mentor y amigo para el papel de Harry Lime, el verdadero vértice del triángulo protagonista aunque su aparición tuviese lugar mediada la película. Orson Welles ansioso por conseguir financiación para uno de sus difíciles proyectos (la adaptación de Otelo) eligió a la hora de firmar el contrato un salario de cien mil dólares en vez del 20% de recaudación, lo que hubiese significado una fortuna dada la notable trayectoria comercial de la obra y su gran taquillaje a lo largo de los años. En 1951coescribió e interpretó una versión para la radio londinense de este personaje en 39 programas.

Alida Valli contratada para una fulgurante pero corta carrera en Estados Unidos por David O’ Selznick interpretó con misterio y convicción a la gélida Anna, la fiel enamorada de Harry Line luchando con sus dificultades para disimular su pronunciado acento italiano. En cuanto a Trevor Howard había sido lanzado a la fama por el propio Carol Reed como protagonista de Brief Encounter, la interpretación del mayor Calloway le significó la consagración definitiva. El reparto incluía en cometidos episódicos al sobrio actor de la escena vienesa Paul Horbiger en el papel del portero del inmueble que ha visto salir al tercer hombre a Annie Rosar como su esposa, Siegfried Breuer como Popescu, Bernard Lee, el más tarde famoso como M de la serie de James Bond como el sargento Paine. El vienés Ernst Deutsch como el Baron Kurtz que sería famoso también por su participación en la biopic sobre Freud de John Huston y el británico y pusilánime Wilfrid Hyde-White como Crabbin. Hedwig Bleibtreu que a los ochenta años seguía llenando los teatros vieneses donde actuaba incansablemente encarnó a la patrona de Anna.

Carol Reed recibió con agrado el llamado de su productor y amigo Alexander Korda de colaborar en los interiores en los estudios Shepperton con su hermano Vincent, de acreditada fama como director artístico de sus películas. Fueron suyas las soberbias ambientaciones del cabaret, el domicilio de Harry Lime y las estaciones de policía. Los exteriores de la película se rodaron de forma contrastada y sobria gracias a la cámara maestra de Robert Krasker en la ciudad dividida de Viena sacando espléndido partido a la noria gigante del parque de atracciones.

Las tropas rusas ocupantes de la ciudad aunque en un principio dieron permiso de rodaje en su zona luego cambiaron de parecer. Interrumpieron el rodaje en la estación cuyas últimas tomas fueron realizadas subrepticiamente por Guy Hamilton (primer ayudante de dirección), quien distrajo a las autoridades allí presentes durante el delicado momento.

Una frase escrita por Orson Welles y en boca de Harry Lime, personaje negativo pero fascinante de la película, se haría parte del rico anecdotario de la historia del cine: En Italia, en 30 años de dominación de los Borgia hubo guerras, terror, sangre y muerte, pero surgieron Miguel Angel, Leonardo da Vinci y el Renacimiento. En Suiza hubo amor y fraternidad, 500 años de democracia y paz y ¿que tenemos? El reloj de cucú”

El tema de Harry Lime creado e interpretado con su cítara por Antón Karas fue uno de los grandes éxitos de la película y fue también una tumba remunerada pero peligrosa para el compositor que vivió desde entonces a la sombra de su éxito trabajando ante un público de salas de fiesta que tomara la cítara y tocara una y otra vez la pegadiza melodía. Antes de la película Karas se ganaba la vida tocando en las calles de la ciudad y fue ahí, en el aire libre, donde lo descubrió Carol Reed.