Cobertura: 15 Festival Cievyc Cine 08 Sala de espera



Sala de espera, de Fernanda Ramírez, con Martin Martínez, 2008, 13’

Todo es una sala de espera

El guión de
Sala de espera capta muy bien el día a día de un desempleado. Trece minutos de una historia ficticia que podría ser real, ya que muchas personas se encuentran en la situación de Franco. El despertador que marca una vez más que hay que levantarse con esperanzas de que “hoy puede ser un día distinto”. La historia de un estudiante que vive bajo una situación crítica, que necesita un empleo, que vive con los clasificados y los libros de la facultad bajo el brazo.
Sala de espera es donde se pasa la mayor parte de su tiempo cuando se busca trabajo. Largas horas esperando de una entrevista a otra, o un llamado telefónico positivo, que en este caso no llega. El mayor error es de montaje, y eso es muy notable. Por momentos es medio lento y hay muchos tiempos muertos sin ningún fin. Lo malo de este corto es que me hizo sentir un poco en una sala de espera entre plano y plano.

Sala de espera
tiene una muy buena fotografía, con planos muy expresivos. En una de las últimas escenas, llaman a Franco para avisar que el puesto de trabajo fue entregado a otra persona. Tenemos al personaje parado en la mitad de una vereda, centrado, con mucho espacio vacío a sus costados, que marcan su soledad y la desilusión. Y para mejorar el plano, hacen que Franco se siente en el cordón haciéndolo ver, esta vez, diminuto.

Marcos Di Biase


1 comentarios:

Sole Lila dijo...

El momento que el muchacho se pone a llorar en el hombro de la madre por no haber conseguido trabajo es menos malo que el final, cuando "yo vengo a ofrecer mi corazón" empieza a sonar y se dibuja una sonrisa en la cara del desempleado que emprende una nueva búsqueda con el Clarín en la mano.